Por desgracia No, no existe una legislación que regule hasta donde es reparado y donde empieza a ser reconstruido y por desgracia para todos, hay reparaciones que pretenden ser y son vendidas como reconstruidas, tenga siempre en cuenta que un motor reparado (a veces mal llamado reconstruido) solo se le ha corregido una avería, es decir, no se ha dado por sentado que todo esta averiado y por lo tanto reconstruido de arriba a abajo. Lo más barato en este tipo de producto nos tiene que poner alerta, así como la falta de actitudes técnicas a la hora que le vendan un producto reconstruido, cerciórese que lo que le vender es realmente un producto reconstruido y no un motor reparado a precio de reconstruido.

Debe ser un taller especializado y contar con los útiles y recursos necesarios para este trabajo, sin embargo, cualquier taller mecánico con el distintivo de taller podría hacer el trabajo. Nunca confíe de un taller no autorizado, además por un mal montaje perdería cualquier tipo de garantía en el producto.

Cada producto reconstruido se entrega en condiciones de intercambio, esto quiere decir que el producto averiado o casco debe ser devuelto en condiciones de posible reconstrucción, esto quiere decir que se tiene que devolver con los mismos componentes tal y como se le entrego el producto reconstruido, sin roturas exteriores y montado para su transporte. El casco, es nuestra materia prima y es imprescindible su devolución para que con él podamos hacer otro producto de intercambio. La no devolución en las condiciones de intercambio o la no devolución implicará un sobre precio del producto adquirido. Cuando el producto averiado este preparado para transporte enviaremos a nuestro transportista a recogerlo sin coste adicional.

La garantía de un producto reconstruido es de 1 año desde la fecha de factura, es imprescindible la presentación de la factura para poder actuar y solventar la incidencia.

Aunque un motor, turbo o caja de cambios usada nos llame la atención por su precio y pensemos que siempre va ser más barato, no es muy recomendable ya que a diferencia de un producto que no sufra desgaste o tenga un funcionamiento mecánico (piloto, paragolpes, etc.) que podemos saber en el estado en el que los compramos, no ocurre lo mismo con un motor ya que nunca podremos saber cual es su estado interior, debe saber que de funcionar mal el motor y necesitar su sustitución, normalmente el desguace se limita a reemplazarlo por otro, pero no asume costes de mano de obra. Por supuesto la durabilidad y fiabilidad de un motor usado es limitada ya que cuenta con kilómetros, pero con un producto reconstruido el kilometraje es cero y comienza su vida útil. Le aconsejamos que compare precios de usado y reconstruido ya que no siempre la diferencia merece la pena.

Un producto reconstruido no requiere de un mantenimiento adicional, debe de hacer el mantenimiento indicado por el fabricante. Después del montaje es recomendable una revisión de los niveles o perdidas.

No, su venta requiere un conocimiento específico del producto, este tipo de producto requiere de un asesoramiento especializado al taller montador antes, durante y después del montaje. No es un producto de mantenimiento que se pueda adquirir a través de distribuidores, centros comerciales o vía internet.

Un motor reconstruido es el resultado del trabajo realizado en un motor en desuso, es desmontado íntegramente pieza a pieza, se rechazan las piezas de desgaste, el resto de piezas a reutilizar son limpiadas, controladas, medidas y ajustadas, para después ensamblarlas junto con las piezas nuevas. Después de todo el proceso, es probado para revisar posibles fugas o mal funcionamiento. Con todo el proceso se elimina la avería que el motor antiguo pudiera tener y las que pudiesen estar a punto de ocurrir, aparte de subsanar errores o fallos de diseño que el motor pudiera tener en su origen, haciendo las modificaciones necesarias para alargar su durabilidad.

Hacer las revisiones en la casa o en un taller de confianza siempre dentro de los intervalos marcados por el fabricante nos puede reducir las posibilidades de avería, pero no garantiza que esta no se produzca, ya que muchas veces la avería se produce por los sistemas auxiliares del motor que no suelen chequearse en las revisiones, a no ser que ya se aprecien síntomas anómalos. También estos componentes pueden presentar un buen estado visualmente, pero todos ellos tienen una vida útil llegando a averiarse posterior a la revisión, llegando a causar una avería importante. Es muy importante que ante cualquier síntoma de avería que podamos detectar, bien sean por ruidos, fugas, humos excesivos o señales luminosas o acústicas del cuadro de mandos, detengamos el vehículo y no continuemos la marcha.